“AMIGA”
Era 5 de julio y era el verano más intenso que había imaginado. Yo estaba felizmente de novia con un chico que se llamaba Jules. Éramos tan felices, yo no podía pedir más.
Vale admitir que vivíamos un amor un poco a distancia, el vivía en la misma ciudad pero antes nos veíamos siempre porque íbamos al mismo curso, pero ahora ya no, y mis padres eran muy estrictos conmigo, y claro, solo tenía 14 años.
Una mañana me llamó para que vallamos a almorzar a algún lado, ir a caminar por ahí.
Acepté obviamente no podía decirle que no, él era todo lo que soñaba.
Nos encontramos en el centro de la ciudad, y fuimos a un restorán de comida rápida. Mientras él hacia la fila para comprar la comida, yo me senté en una mesa junto a la ventana.
Miré hacia la ventana y vi entrar a una chica muy bonita. Alta, rubia, pero parecía de la misma edad mía, o más bien la de Jules –el me llevaba 1 año-.
Ella se dirigió hacia la fila y saludo a Jules, bueno, no me preocupe, podía ser una amiga, pero igual yo era celosa y me puse a escuchar que hablaban ya que yo no estaba muy lejos de ellos.
-¿Viniste solo Jules?- dijo la chica “x”.
- Emm... Verás... Vine con una amiga mía- dijo un poco nervioso.
¡¿Amiga había dicho?!, ¿Cómo que amiga?, en una semana íbamos a cumplir cinco meses de novios, no podía decir eso.
Para evitar escándalos me fui sin que me viera. No podía dejar de llorar, camine por el centro sin casi ver porque las lágrimas me segaban. ¿Por qué me falló?, creí que éramos felices, pero me negó delante de una amiga o lo que sea que fuera esa idiota.
Sonó mi celular, y era él.
- Mi amor,¿Dónde estás?- dijo haciéndose el romántico.
- Discúlpame “amigo”, creí que los amigos no deben comer juntos y me fui- dije irónicamente
-¿Amigos?, ¿de que hablas Julieta?- dijo haciéndose el desentendido.
- De nada, hasta nunca, gracias por ser tan bueno conmigo.-
Desde ese día no supe nada más de él, pero en mi corazón siempre quedo esa herida.